He llegado a Madrid y me ha entrado frío. Un frío paralizante que poco tiene que ver con los termómetros. El frío de la rutina, de las ausencias, de domingos vacíos y de un año por delante. Me he tapado con la manta marrón de cuadros y me he puesto
Mi cena con André.
(Me he despertado agitada en mitad de la noche....... se me había olvidado, nunca he podido dormir con calcetines.)
2 comentarios:
Que aproveche, bienvenida, yo tampoco puedo dormir con calcetines.
besazos
Mil gracias Marta!
Ganas de contaros, de enseñaros fotos...pronto,pronto.
Muchos besos!
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